«Demostremos al mundo que crecemos como personas»; hablan los alumnos.
PALABRAS DE ALEJANDRO MORA Y BELÉN QUESADA, ALUMNOS DE 1º BAT EN EL ACTO DE APERTURA DE CURSO 2018-19
Señor obispo de la Diócesis de Orihuela-Alicante, Don Jesús Murgui Soriano, autoridades políticas y religiosas, equipo directivo del Colegio Diocesano Santo Domingo, claustro de profesores del mismo, personal de servicios del centro, padres y madres, alumnos del colegio, pero en especial, de primero de bachillerato: buenas noches a todos.
Hace escasos minutos, hemos recibido la imposición de becas de nuestra pasada etapa de secundaria, un acto que significa nuestra razón de ser: familia educativa reunida que busca el bien para crecer en el Amor en el servicio a la verdad y a la justicia para la humanidad de hoy, unos años de preparación hacia bachillerato tanto académica como personalmente, o para algunos otros un símbolo de comienzo en el centro.
Para nosotros, la beca es un símbolo de unidad, Santo Domingo, aparte de ser centro educativo es familia, a la que todos nosotros pertenecemos, un símbolo de crecimiento, en el que vemos reflejado todos los años y etapas cursadas en él, por el que han pasado cantidad de docentes, sacerdotes y formadores, que nos han aportado objetivos diferentes, para mejorar como personas, pero nunca olvidemos que en un futuro, será algo que nos recordará todas aquellas personas y emociones que pasamos junto a ellas.
La beca no es sólo un simple trozo de tela bordada, es una recopilación de nuestras vivencias compartidas en las que hemos pasado por todo, pero juntos. Algunos llevamos aquí doce años otros quince y otros dos pero si tenemos algo en común es esta formación instruida con cariño y de cara a la fe cristiana. Miramos atrás y nos damos cuenta de lo rápido que pasa el tiempo, pues queridos compañeros pronto nos enfrentaremos al mundo de verdad pero, gracias a esta sólida base que se ha ido construyendo durante nuestra estancia en este centro de iniciación cristiana saldremos más fuertes que nunca.
Compañeros, crezcamos como personas, maduremos en la fe, vivamos todos los momentos juntos posibles estos dos últimos años, demostremos al mundo que hemos crecido como personas durante estos años, y que no solo hemos venido al colegio para aprender lo que podemos aprender en cualquier otro centro. Finalmente sólo agradecer a todos los aquí presentes por su asistencia, hoy es un día muy importante para todos nosotros y no podríamos estar en mejor compañía. Gracias por formar parte de nuestra familia, de nuestro día.
Hoy desde aquí os damos las gracias a todos vosotros, padres y madres, gracias por elegir Santo Domingo como nuestro centro de educación durante estos años, gracias por confiar en él y apostar por la educación de lo más querido de vuestra vida, vuestros hijos. Gracias a ello, a esa decisión tomada en un momento, hoy somos incluso mejor de lo que esperábamos ser.
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Enhorabuena a nuestros alumnos del colegio por su participación y sintonía en el solemne acto de apertura de curso. Fue para ellos motivo de satisfacción estar junto al Obispo D. Jesús en el acto siendo testigos del anuncio del 450 aniversario de la fundación del origen de nuestro colegio con la celebración de un Congreso Diocesano de Educación.
