Monseñor Jesús Murgui Soriano será el NUEVO Obispo de Orihuela-Alicante
La Santa Sede lo ha hecho público esta misma mañana aceptando así la renuncia que por motivos de edad que presentó hace un año Monseñor Rafael Palmero
La Nunciatura Apostólica en España comunica a la Conferencia Episcopal Española (CEE) que a las 12:00 horas de hoy, viernes 27 de julio, la Santa Sede ha hecho público que el Papa Benedicto XVI ha aceptado la renuncia presentada por motivos de edad como obispo diocesano de Mons. Rafael Palmero Ramos nombrando nuevo Obispo de la Diócesis de Orihuela-Alicante a Monseñor Jesús Murgui Soriano, hasta ahora Obispo de Mallorca desde finales de 2003.
De este modo el Santo Padre acepta la renuncia que el Obispo de Orihuela-Alicante, Monseñor Rafael Palmero, presentó el 27 de julio del año pasado. Fecha en la que cumplía 75 años, el límite de edad que fija el Derecho Canónico para ocupar este cargo.
Monseñor Rafael Palmero fue nombrado obispo de Orihuela-Alicante en 2005, después de que el Papa aceptase la renuncia del anterior prelado, Monseñor Victorio Oliver, también por motivos de edad. En aquel momento ocupaba la sede de de Palencia.
Mons. Palmero pasa así a ser Obispo Emérito de Orihuela-Alicante y sigue manteniendo los cargos que ocupa en la Conferencia Episcopal, donde preside el Departamento Pastoral de la Salud, al igual que continúa como miembro del Pontificio Consejo para los Agentes Sanitarios en Roma.
En un plazo aproximado de dos meses se llevará a cabo la toma de posesión por parte del nuevo Obispo diocesano, que viene de pasar sus últimos 8 años en Mallorca.
Monseñor Jesús Murgui nació en Valencia el 17 de abril de 1946 y fue ordenado sacerdote el 21 de septiembre de 1969 obteniendo la licenciatura en teología por la Universidad Pontificia de Salamanca y doctorándose en la Universidad Gregoriana de Roma. Nombrado Obispo Auxiliar de Valencia en marzo de 1996 recibió la ordenación episcopal el 11 de mayo del mismo año. Entre 1999 y 2001 ha ejercido las funciones de Administrador Apostólico de Menorca y, desde el 29 de diciembre de 2003, fue nombrado por el Papa Juan Pablo II Obispo de Mallorca.